Por Claudia Juliana
#Travelsolo se ha convertido en una actividad o hábito importante para mi vida. Me ha enseñado a salir de mi zona de confort, a valorar mis comodidades y aventurarme a lugares poco “comunes” que me han dejado muchas enseñanzas. #Travelsolo como mujer también implica viajar con muchas precauciones por seguridad y con responsabilidad ambiental por el lugar que uno visita.
El primer #Travelsolo del 2023 llegó como una sugerencia. Si soy honesta, sólo tenía claro que quería un destino con agua y naturaleza y no me imaginé que iba a terminar “fuera del continente”; puedo confirmarles que el Parque Nacional Natural (PNN) Gorgona ha sido una de las mejores sugerencias de viaje que he recibido.
Este PNN o isla ubicada en el pacífico colombiano es un destino espectacular; es un ecosistema particular por su bosque húmedo tropical, por la variedad de flora y fauna, y por su área marítima. Ni que decir de toda el agua que cae durante el año; me recibió con lluvia y me despidió de la misma forma.
Es un lugar de mucha tranquilidad donde uno se dedica a disfrutar del mar y la naturaleza que lo rodea; a respirar aire puro y a sentarse a ver las especies que pasan por el lado de uno, como los monos cariblanco (Cebus Capucinus), los vecinos más inquietos que he tenido durante un viaje. Además, para los amantes del mar es un destino donde se pueden ver muchas especies marítimas; me quedo corta en contar mi experiencia pues solo hice snorkel y lo que vi fue maravilloso, así que imaginen si hubiese buceado (tarea pendiente). ¡Un #Travelsolo que repetiría sin pensarlo dos veces!
También, es un détox de tecnología y basura; por un lado, que el celular sólo funcione para fotos y videos, te obliga a interactuar con los demás o a disfrutar más tu propia compañía. Por otro lado, el que tengamos que pasar por una aduana ecológica para preservar el lugar que visitamos nos hace más consciente de lo que consumimos; plástico que entra a la isla debe volver a salir lo cual nos alerta sobre nuestro papel como turistas y cómo debemos comportarnos con la isla, y en cualquier lugar que visitemos.
Allí hacen investigación constante y no hay que ser expertos ambientales para darse cuenta sobre todos los aportes de Gorgona. En una entrada anterior en este blog se menciona la discusión actual sobre un proyecto en isla. Si me preguntan a mí, ese proyecto de guardacostas puede ser más negativo que positivo; es claro que cada cambio en un ecosistema afecta a sus habitantes entendiéndose por ellos a toda la fauna y flora de la isla, así que lo más probable es que afecte mucho a Gorgona o que se pierda lo que por tantos años han conservado. Si se piensa desde el lado geoestratégico y de seguridad, tal vez existan otras opciones diferentes a la propuesta. ¿Qué pasa con la seguridad si no se hace el proyecto? ¿No se pueden utilizar los recursos del proyecto en otra actividad? ¿Cuál es el impacto a corto y largo plazo con la construcción? Preguntas sueltas que dejo por acá. Luego de disfrutar y desconectarme en Gorgona, sólo extiendo la invitación a realizar más ecoturismo y, por supuesto, a visitar ese pequeño pero imponente paraíso en el pacífico caucano; #Travelsolo o acompañado, lo que mejor se les dé. Es un destino que no es para todo el mundo por la tranquilidad o por el “exceso” de naturaleza y agua, pero al que sin duda hay que darle la oportunidad de conocer con responsabilidad ambiental y del cual se pueden sorprender gratamente como me pasó a mí.
Por Claudia Juliana Meza
